Igual que hace millones de siglos en un microscópico mundo distante se unieron, dos células cualquiera, dos seres distintos, amándose por vez primera.
Ese día te veía tan cerca que estaba sientiendo que nunca te había visto así.
Movías las pupilas y supe que estabas amándome. No quedaban espacios entre nosotros. Pansa con pansa me perdí en ese abrazo que sostuvo mi todo, yo volé, vos también. Fue una estampida peligrosísima y sin embargo parecía que podía estar cayéndose el universo encima nuestro e igual nos íbamos a querer quedar así. Me dejaste pasar y yo también. Entré, sin peros.
Y todo fue mío y justo, no quise nada más. Te envolviste de mí, nos enredamos. Y enseguida quise ser quien resolviese todos tus problemas. Estuve segura que ibas a quedarte conmigo. Creí de nuevo en la eternidad.
Ahora te obligo, dame más.
Una barta descripción, superloqueada por demás y cuasodesopilante.
el superloquio, sos vos pedazo de misteriosita.
ResponderEliminarPensaste que NUNCA iba a verlo, inmunda.. igual yo sabía. Tu sabías (ellos, NOSOTROS, vosotros) que más dá.
ya lo, ya lo sabes.
Tu virus
borré todo,cagasteis